El boom de la construcción en Estados Unidos le va a poner las cosas difíciles a Donald Trump y a su idea de construir un muro en la frontera con México. La Oficina de Estadísticas Laborales de Aperturas de Empleo y la Encuesta de Voluntarios de Mano de Obra (Bureau of Labor Statistics Job Openings and Labor Turnover Survey) asegura que hay casi 200.000 vacantes en la industria de la construcción en todo el país debido al auge en el sector de la construcción. La demanda laboral ha crecido un 81% en solo dos años, con lo cual la escasez de mano de obra se ha disparado.

El proyecto de construcción del muro requeriría la participación de cientos de miles de trabajadores. La iniciativa se enfrenta a un segundo obstáculo: cerca de la mitad de los trabajadores de la construcción en Texas son inmigrantes indocumentados y en todo el país el 14% carece de autorización para trabajar, según Workers Defense Project.

El muro, cuyo coste se ha estimado en 25.000 millones de dólares, sería uno de los mayores proyectos de obra pública en Estados Unidos desde la construcción de la presa Hoover durante la Gran Depresión. Además del propio muro, sería necesaria la construcción de nuevas carreteras y plantas temporales de hormigón para llegar a las zonas menos habitadas de la zona desértica que hace de frontera entre EE.UU y México.

Los salarios medios por hora en el sector se sitúan en 28,42 dólares por hora, un 3% más que el año pasado, el mayor incremento anual desde 2009, aunque los salarios de los trabajadores indocumentados son generalmente más bajos. Además, la escasez de trabajadores se agrava en la zona fronteriza, donde la industria de la construcción entra en competencia por la mano de obra con los productores de petróleo y gas, cuyos salarios son mayores.

En todo el país, dos tercios de las empresas de construcción están teniendo dificultades para encontrar trabajadores, según una encuesta de la Associated General Contractors. En Texas, con más de 2.000 km de frontera, el 67% de los constructores tuvieron problemas para encontrar trabajadores cualificados.

La construcción está viviendo un nuevo boom en Estados Unidos, tras años de recesión. Hasta 2009 el desempleo superó el 27%, 2,3 millones de trabajadores perdieron sus empleos y muchos abandonaron el sector. En 2016, el desempleo cayó hasta el 4,5%, el nivel más bajo en una década. Los trabajadores indocumentados dedicados a la construcción eran 1,2 millones en 2012, un 23% menos que cinco años antes.